Las Semillas
La mayoría de las plantas se reproducen por semillas.
La semilla se origina por un proceso sexual, entre la unión del gameto femenino
con el gameto masculino, y dentro de ella se produce algo parecido al embrión.
Si se siembra, la semilla germinará y crecerá una nueva planta.
Esta forma de reproducción consiste en el
desprendimiento natural o artificial de una parte de la planta, que son capaces
de crecer hasta formar un nuevo individuo, semejante a la planta de la cual se
desprendió. Cuando una planta se reproduce de esta manera, la planta madre y la
planta hija tienen algunas características diferentes. Por ejemplo, pueden
tener flores de otro color, frutos más pequeños, o ser más resistentes a alguna
enfermedad. Las semillas varían de forma y tamaño. Hay semillas muy pequeñas
como las de pimentón y tomate; hay semillas muy grandes como las de mango y
cocotero. Según la forma, pueden ser arriñonadas, redondas, aplanadas, rugosas,
entre otras.
El proceso por el que una semilla da origen a una
nueva planta se llama germinación. Para que suceda, es necesario que se den
ciertas condiciones favorables.
Que la semilla esté madura, en buen estado y con su
embrión sano.
Aire suficiente, calor y luz del sol.
Aire suficiente, calor y luz del sol.
En la medida que el embrión se va desarrollando, se
produce el crecimiento de la planta.
Me parece muy interesante el contenido de esta pagina
ResponderEliminarMe alegra saber que le es de interés.
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ResponderEliminarUn tema muy interesante y amplio. Explicado de una forma muy fàcil de comprender.
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